El peligro de las redes sociales

Hoy en día, las redes sociales forman parte de nuestra vida cotidiana. Nos conectan, nos informan y nos entretienen. Sin embargo, sin un uso adecuado, éstas tienen un impacto profundo en nuestra salud mental.
Cuando pasamos largos periodos en redes, nuestro cerebro entra en un estado de absorción en el que recibimos información que no siempre es beneficiosa y nos puede desestabilizar emocionalmente. Para protegerse de esto es importante ser consciente de los siguientes puntos:
1- Sobrecarga de información.
El acceso a un flujo constante de noticias, opiniones y contenido visual nos expone a demasiada información, a menudo contradictoria. Esta sobreinformación nos genera ansiedad y la sensación de no estar haciendo lo suficiente con nuestras vidas, cuando en realidad solo estamos lidiando con un volumen abrumador de estímulos. Seleccionar fuentes de información de calidad (evitar el clickbait o cebo de clicks) y protegerse de la sobreinformación es clave para mantener nuestra salud mental.
2- Desgaste de la empatía
Tener un contacto diario con sucesos, injusticias y tragedias que están fuera de nuestro control puede desensibilizarnos. En lugar de sentir empatía hacia los demás, terminamos agotados emocionalmente. Además, al no tener el control de la situación nos produce una gran frustración ver desgracias que no podemos solucionar y nos genera una visión muy pesimista del mundo, sintiendo el peligro real en el día a día (accidentes, tragedias, engaños, guerras…) lo que nos pone en sobre aviso constante y genera ansiedad.
3- Comparación social y disminución del autoestima
Las redes sociales son un escaparate de vidas «perfectas», cuidadosamente editadas. Sin darnos cuenta, nos comparamos con estándares irreales: el cuerpo perfecto, la relación ideal, el éxito profesional, la casa idílica, las vacaciones en el paraíso… Esto mina nuestra autoestima y nos lleva a sentir emociones negativas que nos hacen sentir que nuestra vida es insuficiente a pesar de tener de todo. Aunque sepamos que esas imágenes no reflejan la realidad, ponemos en duda la calidad de nuestra vida y minusvaloramos todos los privilegios que tenemos, mostrándonos insatisfechos y siempre anhelando más.
¿Qué podemos hacer?
Si notas que el uso de redes afecta tu salud mental, aquí tienes algunas estrategias:
- Sé consciente: Antes de abrir una app, pregúntate para qué lo haces: ¿buscas información, entretenimiento o simplemente estás aburrido?
- Filtra el contenido: Sigue cuentas que te aporten bienestar y deja de consumir aquellas que te hagan sentir mal contigo mismo.
- Pon límites: Establece horarios y tiempo máximo para usar redes. Permítete desconectar.
- Fomenta la interacción real: Prioriza relacionarte en persona y, si esto no fuera posible, las conversaciones telefónicas o videollamadas antes que la mensajería instantánea.
En consulta, trabajo con niños, adolescentes, adultos, familias y parejas para identificar cómo el uso de las redes afecta su bienestar emocional y cómo construir hábitos más saludables. Si necesitas apoyo, estaré encantada de ayudarte.
P.D. Estoy en Bilbao y mi objetivo es acompañarte hacia una vida más equilibrada y satisfactoria.
Si este tema te resuena, no dudes en contactarme.
Laura Suero, Psicóloga Sanitaria. Colón de Larreategui, 41, 1ºizq 48009 Bilbao
Bilbao | Atención a adolescentes, adultos, familias y parejas.
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